Participa en el 1er Concurso de Grabado/Estampa, en los niveles estudiante o profesional.
1) Originalidad de la obra
2) Proceso creativo
3) Contenido temático
4) Aplicación y desarrollo de la técnica
La obra presentada al concurso deberá ser original e inédita en toda su forma, así como no haber sido presentado en ningún otro certamen o hecho público (tanto de forma impresa como digital). En caso de que la obra resultara copia en contenido o similitud será descalificada y tendrá que regresar los incentivos que le hayan sido entregados. Todo material de índole pornográfico explícito o que atente contra la dignidad humana, será rechazado del concurso.
Debes ser residente en México y ser mayor de edad
Se podrá registrar sólo una obra por código de registro, este será proporcionado por los distribuidores autorizados una vez que realice su compra de los productos de las marcas participantes.
Se debe enviar en formato JPG, Color RGB, con resolución de 300 DPIs (3,300 x 2,550 pixeles)
Es una alegoría del carpintero de mi barrio el cual ya falleció y también de todos estos grandes oficios que casi ya no hay, puesto que durante mi carrera de artes visuales, fue mi fabricante de lienzos y marcos la referencia es una de mis primeras fotos análogas de el en su taller, (trabajando en conjunto la gráfica y la fotografía) es un recordatorio de estos oficios en linóleo a manera de colage para una mejor profundidad visual.
Cuántos suspiros Pensé en la gran labor de las muñecas cuenta penas y la cantidad de suspiros que una persona suelta inconscientemente. A los merengues también se les llama suspiros, pueden ser dulces aunque cuando se queman son amargos. No todas las penas serán malas, puede que solo con el tiempo sea algo necesariamente bueno. Cuántos lamentos, lágrimas y tristezas la almohada guarda, anhelo a alguien que me escuche, en un pensamiento pequeño o una preocupación que quite el sueño. quisiera una muñeca cuenta penas, que le pueda encomendar todos mis suspiros. Tener a alguien que me escuche para dormir liviana una noche. Merengues azucarados y salados, quedan amargos cuando las penas se comen en el alma, y no son encomendados a los oídos de un abrazo amigo. Antes de dormir un beso de la muñeca quitapenas para que tus ojos no se hinchen en la tristeza puede salvar a un alma en insomnio, que sobre piensa noche o día. Es un deseo de una querida amiga, que administra la tristeza para que algo bueno venga. cuantos suspiros están en la cuenta mientras se llama a una dulce mañana.
Este grabado no emana una historia, si no activa al observador a una lectura simbólica. Tratándose de una exploración sobre el caminar como un gesto ritual, el fuego como memoria viva, y la noche como un espacio fértil para la unión entre lo humano, lo animal, lo mítico, la memoria cultural y los procesos internos de trasformación. La simbología parte de nuestro personaje principal, una mujer que atraviesa la noche como territorio liminal, no es la evocación humana sino una entidad caminante entre mundos. La noche funciona como un umbral un espacio donde el tiempo se despliega y la racional se une con lo intuitivo , lo ancestral, lo no dicho. El tlacuache es un mediador introduciendo al el fuego a través de una sacrificio portando también la memoria encendida, como conocimiento que trasmite con dolor, con herida trasformadora. La luna este símbolo no se impone, se revela. Esta ahí para el que sabe mirar, siendo una metáfora del sacrificio que dejó huella, del acto generoso que trasciende el instante. Su integración sugiere que las acciones invisibles también tienen poder, que los gestos pequeños constituyen historias.
Temas; Identidad, memoria individual y colectiva. Mi grabado surge de una revisión a mi archivo fotográfico familiar. Explora los vínculos familiares y sociales que se generan a partir del carnaval y de la figura del chinelo como símbolo identitario de Yautepec, Morelos. Mi niñez transcurrió en el Estado de México, donde viví con mi madre y mi hermano, mientras mi padre residía en Yautepec, Morelos, por motivos laborales. Por ello, visitar Yautepec era poco frecuente, pero profundamente significativo. Llegar allí era entra en un alucín donde sentía la unión familiar y la creatividad. La imagen en la estampa es un retrato en el carnaval de Yautepec, del año de 1996, en donde mi madre me está cargando al lado de un familiar que se vestía de chinelo. El traje de chinelo representa, identidad aporta sentido de pertenencia, y aborda lo individual y lo colectivo. Esta obra relata una etapa muy importante en mi vida, en donde se forjaron recuerdos que actualmente le dan sentido a mi obra artística y a mi existencia. Y que me hacen reencontrarme cuando me siento perdido. En el aspecto formal; hago una apropiación de la imagen fotográfica y la intervengo con dibujos y garabatos que remiten a “lo infantil”. Me interesa enlazar el contraste entre lo descriptivo de la fotografía y la esencia lúdica que emana de los garabatos genuinos de un niño.
El título de la obra es una palabra maya que significa alma, voluntad, intención o emoción. Con esta obra quiero expresar la importancia de regresar a nuestras raíces, de que el arte vuelva a reconectar con los medios tradicionales y artesanales, lejos del pensamiento capitalista y virtual que lo mercantiliza y lo aleja. Creo que el arte debe ser un reflejo del corazón, el alma y la mente de los artistas, ya que primeramente somos comunicadores y artesanos. Es necesario que los artistas "se ensucien las manos" y se involucren en su arte, en su proceso y su creación, que les apasione lo que están haciendo y de lo que están hablando. El mundo lo necesita ahora más que nunca.
En la termodinámica, cuando hablamos de Entropía nos referimos a una magnitud que mide el grado de desorden o aleatoriedad de un sistema. La Segunda Ley de la Termodinámica nos dice que en un sistema aislado siempre habrá una tendencia de moverse del orden al caos, un ciclo enivitable que forma parte de la naturaleza del universo vivo mismo. Lo entrópico rodea, moldea, tranforma y vive... Lino Grabado a placa perdida y rompecabezas con 16 tintas. Impresión manual asistida con plancha de calor Pieza de papel texturizado de algodón de 300gr
Grabado sobre trovicel. Dónde hago una alegoría a la muerte y como está inevitablemente llegará a nosotros, siempre tendrá la respuesta para acabar con nuestra vida. En este caso el caballero representando al Aleph (inicio) y que se asocia con el buey que simboliza la fuerza. A pesar de contar con esa fuerza la muerte siempre será inevitable. Tomando inspiración de la película llamada de la misma manera.
Esta pieza busca representar el miedo latente que podemos experimentar en diferentes facetas de la vida. Estamos dentro de una sociedad que nosotros mismos construimos ladrillo a ladrillo y a la cual también descuidamos, es por eso que la violencia predomina en nuestro país. Nos sentimos sumergidos y vulnerables pues constantemente esta escrito sobre nosotros el miedo, recordándonos constantemente que algo puede pasarnos en cualquier momento
La obra propone una resignificación del ícono guadalupano a partir del contexto de violencia y desaparición en México. La silueta de la Virgen se convierte en un arquetipo colectivo que encarna a las madres buscadoras, desplazando lo divino para situar en el centro la acción y resistencia materna. Mediante la articulación de símbolos de duelo, muerte y abandono, la pieza cuestiona la ausencia de respuestas institucionales y religiosas, al tiempo que visibiliza la capacidad de las mujeres para sostener la memoria y enfrentar la violencia.
El grabado presenta una escena de la vida cotidiana en la que se muestra una paradoja social: mientras la atención colectiva se concentra en un accidente vial sin mayores consecuencias, la presencia de personas en situación de calle u otras realidades humanas que suceden a diario parecen pasar desapercibidos. La obra pone en evidencia la manera en que ciertos acontecimientos logran captar la mirada pública con intensidad, mientras que otros, profundamente ligados a la dignidad y vulnerabilidad de las personas, son normalizados o ignorados. A través de esta representación, se invita a reflexionar sobre las jerarquías de interés y sensibilidad que configuran nuestra percepción social.
La figura de la bruja es una adaptación de las creencias traídas de Europa haciendo sincretismo con el pensamiento de los pueblos originarios, tiene presencia en los relatos de zonas rurales y algunas urbanas de México como un dejo del imaginario construído durante el proceso de colonización. Los relatos sobre brujas que depredan a los infantes siguen contándose y traen consigo la posibilidad de dar una explicación poco convencional a situaciones funestas. Esta pieza representa el momento en que una entidad maligna está a punto de atacar anulando la eficacia del amuleto de las tijeras a manera de cruz. Maldad e inocencia con un final cruento, el temor por la seguridad del porvenir.
"Cimientos del alba" es un homenaje al enraizamiento familiar, representando la unión de dos abuelos por medio de juntas (unión de ladrillos) que simbolizan vínculo y crecimiento. Son ellos el cimiento de un esquema mucho más grande, una familia, hijos, nietos, bisnietos, etc.
Grabado en linoleo de 30x30cm en papel de 40 x 50 cms La imagen representa 2 mujeres cocineras de la comunidad de San Mateo Yucutindo, en el estado de Oaxaca, en la cual podemos ver que una le ayuda a colocarse el reboso a la otra, esta obra es una alegoria al trabajo en equipo, a la sororidad y a las tradiciones de las comunidades originarias, en las cuales a tra vez del trabajo fisico, tranforman las materias primas en alimentos que nutren a las familias.
Caminando, me encontré un pedazo de revista pisado y arrugado que mostraba imágenes de la Paris Fashion Week. Me llamaron tanto la atención las fotografías que decidí recoger aquel desecho y, a partir de él, inspirarme para realizar este grabado. De ahí el nombre Tlazol, ya que mi inspiración provino de la basura.
Tras el desastre nuclear de Chernóbil, los girasoles fueron empleados en procesos de fitorremediación para absorber metales pesados y toxinas del suelo contaminado. Estas plantas, al incorporar en su cuerpo los residuos de un ambiente envenenado, sobrevivieron, pero su vitalidad quedó marcada por la mutación y la alteración irreversible de su forma. En esta estampa, el girasol mutado funciona como metáfora del cuerpo atravesado por un trauma extremo. Al igual que la planta que absorbe la toxicidad de su entorno, el cuerpo humano asimila en su interior el venenos de la experiencia traumática y violenta. No se trata de una vida que retorna a la normalidad, sino de una existencia transformada, de un dolor que se mantiene en el cuerpo y se vive con él. Es una existencia quebrada, que se sostiene del vacío y se sobrevive con una herida persistente.
La obra titulada ¨Perspectivas¨ surge de la experimentación del conjunto de materiales y lo que estos materiales pueden crear en conjunto. La exploración de las propiedades del linóleo como cortarlo y segmentarlo para así poder crear diferentes tonalidades en la búsqueda de crear múltiples planos de profundidad. La loneta de algodón que utilizan comúnmente los pintores y la brillanta para encuadernación me permitieron no solo una buena absorción de la tinta, sino que también fungieron visualmente como tonos adicionales a la tinta y obra en general.
La obra: "Cadencia Artificial" es una imitación de un retrato hablado de la Inteligencia Artificial sobre el arte, sólo que hecho por una persona, simulando los pegostes como hace la IA de algunas imágenes o estilos artisticos donde los conocedores pueden identificar su fuente original. Siendo el resultado una reflexión al uso de las IA's como herramienta.
El grabado hace referencia a lugares rurales, especialmente del pueblo que se relaciona con el personaje principal, quien representa a este familiar que me causa sentimientos, este sentir. Sin duda es la silueta de mi abuelo. Este grabado está acompañado de los arrepentimientos de no tener más recuerdos, más tiempo con nuestros seres queridos. No lloré cuando te vi abajo. A veces me pregunto por qué, y creo que era muy pequeño para entender que no te vería de nuevo. Me hubiera gustado conocerte más, quizás el tiempo suficiente para ser consciente de que nada dura para siempre. Abuelo, sé que eras un gran hombre; nadie habla mal de ti aunque ya no estés. Y si bien ya no recuerdo bien tu voz ni las pláticas contigo, sigo admirando todo lo que lograste.
Impresión final Con la matriz terminada, llevé a cabo la impresión definitiva sobre papel de algodón Fabriano. En ese instante, la tinta y la textura se unieron para dar forma a: "El último arrullo", una obra que honra la vida de mi Teresita, mi abuela. Fue como escuchar, a través del papel su voz y sentir sus abrazos que me siguen cuidando a donde quiera que vaya.
En este grabado títulado "Aire y agua " represento a estos elementos vitales para el ser humano, el agua, el viento, que junto con la figura femenina dialogan en un conjunción, creando una unidad mediante las líneas curvas y onduladas que generan movimiento con las plantas, el pescado y la luna.